Los dos policías de la provincia que fueron detenidos ayer, acusados del secuestro extorsivo de Franco Nicolás Lizárraga debían haber estado de guardia en dos puntos de la ciudad pero dejaron sus puestos para involucrarse en el ilícito, según explicó en la audiencia de acusación el fiscal Ernesto Salas López, de la Unidad Investigativa de Delitos Flagrantes II.
A golpes
Ayer a las 2, Lizárraga fue secuestrado por cuatro hombres que a punta de pistola y a golpes lo bajaron de su taxi y lo subieron a una EcoSport dorada en Necochea y Santa Fe. El secuestro ocurrió delante de la esposa de la víctima, Tania Lorena Paredes, y de su hijo de meses.
Pedirán a la Justicia Federal investigar si el secuestro tiene que ver con el narcotráficoLa Policía fue alertada rápidamente por los testigos, que además mencionaron que los secuestradores habrían aducido ser miembros de la fuerza y estar realizando un operativo antidrogas.
Con la información brindada por uno de los vecinos, tres efectivos de la Guardia Urbana y dos de la Patrulla Motorizada localizaron en Santa Fe y Maipú la EcoSport y un Chevrolet Onix blanco que los seguía. Esa delegación arrestó al policía federal Gonzalo Gabriel Lagoria y los efectivos de la provincia Luciano Ramón Campos y Jonathan Gabriel Díaz, que iban en la camioneta con la víctima -que viajaba esposada-. También arrestaron al conductor del Onix, el comerciante gastronómico Ángel Luis Medina que habría dicho que iba acompañando el operativo.
El fiscal precisó en la audiencia que pidió un informe a las divisiones de la fuerza para saber dónde debían estar esa noche cada uno de los uniformados detenidos y si era posible que estuvieran realizando un operativo mixto entre la Policía provincial y la Federal.
Salas explicó que de su investigación surge que Díaz debía estar patrullando junto a otro efectivo las inmediaciones de avenida Colón y Roca, y que, según habría dicho su compañero de turno, Díaz le habría pedido que lo esperara una hora porque debía verse con una mujer.
Campos, por otro lado, debía estar custodiando un predio ferial según le habían designado sus superiores. Lagoria, por toro lado, no contaba con ninguna autorización judicial para realizar un operativo antidrogas ni privar de su libertad a alguien. “Tampoco es posible que un juez le diera esa orden, ya que en la semana le dieron licencia porque sus estudios revelaron que había contraído Covid-19 y debía permanecer aislado en su casa”, detalló Salas.
“Estamos ante un grupo organizado y violento, dispuesto a dejar su trabajo para realizar un ilícito. Su calidad de miembros de la fuerza agravaría la posible pena en su contra, que iría de 10 a 25 años”, dijo el fiscal para pedir la prisión preventiva, medida que fue aceptada por tres meses.
Otros hechos
“La Jefa”, la primera.- Margarita “La Jefa” Toro (foto izquierda), líder de un grupo familiar que según fuentes de la Policía maneja una red de narcomenudeo en Villa 9 de Julio, fue secuestrada en abril de 2018. Después de tenerla cautiva en El Cadillal durante varias horas, su familia habría pagado $ 500.000 para que la liberaran en la zona norte de la capital. Al menos 10 integrantes de una banda, la mayoría de ellos miembros del clan Acevedo, fueron detenidos y esperan ser enjuiciados por este hecho.
Liberado lejos de casa.- Gonzalo Figueroa, de 25 años, fue secuestrado el jueves 12 de diciembre de 2019 en la esquina de 25 de Mayo y México y liberado varias horas después en Santiago del Estero. Fuentes de la investigación dijeron que sospecharon que se trató de un secuestro narco, ya que un miembro de su familia fue procesado por una causa de drogas. No obstante, la víctima acusó a dos empresarios de que habrían pretendido robarle el dinero que tenía para comprarles un camión. Nunca hubo detenidos por este hecho ni se informaron detalles de la pesquisa.
Otro misterio.- El 19 de diciembre de 2019 un grupo comando que se habría movilizado en al menos seis motos ingresó a un domicilio del barrio Ampliación Los Vallistos, al sur de la ciudad, donde se encontraban durmiendo Jorge Rubén “Manzanita” Ríos (53), ex pareja de Nilda “La Cabezona” Gómez, condenada meses atrás por narcotráfico. Los captores del hombre, que había sido condenado por una causa de drogas, le exigieron el pago de un rescate de $ 250.000. Fue liberado, pero nunca se supo si entregó esa cantidad de dinero.
Con proceso.- En junio de 2019, una familia sufrió un robo y la privaron ilegítimamente de la libertad por varias horas hasta que se entregó una no determinada suma de dinero. Por el hecho fueron detenidos Federico “El Loco Fede” Sánchez y Edgard “El Negro” Visuara. Estos se encuentran actualmente acusados del crimen de la empresaria Ana Dominé.
Brutal secuestro.- En junio de 2020 un empresario fue secuestrado por desconocidos en el sur de la ciudad. Lo llevaron a una vivienda (foto derecha), lo golpearon y lo torturaron hasta que avisó a los captores dónde tenía guardado su dinero. Los delincuentes fueron hasta su casa, se apoderaron de una caja fuerte y después lo liberaron en el sur de la capital.
El último hecho.- El 30 de agosto, Mauricio Paradi fue secuestrado cuando ingresaba a su vivienda de Villa 9 de Julio por un grupo de desconocidos. Luego de pagar un rescate de $200.000, fue liberado en la zona de Los Aguirre. Fue salvajemente golpeado por los autores del hecho.